Estamos inmersos en un cambio profundo en materia enérgetica, dada la preocupación creciente por la sobreexplotación de los recursos naturales y su impacto en el cambio climático, y el resurgimiento del interés, principalmente entre los jóvenes, de la importancia de la sostenibilidad en las estrategias de desarrollo y en las energías para apoyarlo.

De ahí que ya sea claro que dejaremos de depender, en los próximos años, de las energías fósiles para usar intensivamente las nuevas energías renovables, más sostenibles y con menor daño al medio ambiente. Nos acercamos a convertirnos, en las próximas décadas, a un mundo eminentemente eléctrico.153_INFOGRAFIA_Eco Energia

Así, pasaremos de la dependencia de las energías fósiles, donde actualmente se consume dos terceras partes del total de este tipo de energías, a dos terceras partes de la energías renovables sin carbono para el año de 2050.

Otro cambio importante es que en la industria eléctrica dejaremos de depender también de los combustibles fósiles, donde las nuevas energías (solar y eólica) aportarán 50% de lo que consuma esta industria en 2050.

Estos datos, y otros relevantes, están contenidos en el informe denominado New Energy Outlook 2019 de Bloomberg (https://bnef.turtl.co/story/neo2019):

·      La energía renovable con mayor crecimiento en los próximos años será la solar, al pasar de ser de 2% de la generación mundial de electricidad en 2019, a ser el 50% en 2050. Un crecimiento exponencial en las tres décadas por venir.

·      La energía eólica va a generar 26% de la electricidad mundial en 2050, en comparación del 5% que actualmente representa.

·      Las energías hidroeléctrica y la nuclear tendrán modestos crecimiento de aquí al 2050, debido principalmente a las disponibilidad de recursos y los altos costos en su producción.

En cuanto a las inversiones previsibles en los próximos años, se identifica el siguiente comportamiento:

·      De hoy al 2050 se invertirán a nivel mundial $13.3 billones de dólares en diferentes activos para generar energía.

·      Del total, 77% se dedicará a la producción de energías renovables, donde $5.3 billones de dólares serán para energía eólica, $4.2 billones de dólares para energía solar y $843,000 millones de dólares para baterías. Ello mientras que el total de la inversión en nueva infraestructura para producir energía fósil no llegará a los $2 billones de dólares.

Otros datos que describen el cambio estructural en el mercado de las energías para 2050:

·      En materia de carbón, pasaremos de la generación de electricidad de 27% actual a 12% para los siguientes 32 años.

·      La energía producida por gas crecerá a razón de 0.6% anual, duplicándose la capacidad actual para 2050.

En Estados Unidos la transición hacia las energía renovables es firme. Cada vez más se está dando el reemplazo del carbón y la energía nuclear. Para 2050 se espera que del total de la energía producida por este país, 47% provendrá de energías renovables.

Aunque de momento no está clara la política de nuestro país en materia del impulso de las energías renovables, se espera que para 2050 provenga 84% de la energía de fuentes que no utilizarán el carbono.

Está claro el futuro de la economía de la energía en las siguientes décadas caminará hacia un mundo eléctrico alimentado por las energías renovables, principalmente impulsada por la energía solar y eólica. El futuro será de energías más limpias, renovables y baratas, lo cual repercutirá de forma definitiva en el perfil competitivo de industrias y países. Ojalá que en México lo tengamos claro.